¿Querés posicionar una web en los primeros puestos de Google? Entonces, es necesario que entiendas qué es la intención de búsqueda o search intent. Por eso, acá te vamos a contar en detalle el significado de este término, qué tipos de intenciones existen (con ejemplos), y cómo podés articular esto en una estrategia de contenido.
A todos en algun momento nos pasó que al enviar un mensaje de texto por whatsapp, la persona que lo recibió no logro entender el verdadero sentido de lo que enviamos. Ahora bien imaginen que tienen que intentar entender ustedes mismos, el real sentido de millones de mensajes que les envían millones de personas cada dia… bueno eso es uno de los grandes desafíos que tiene Google y creanme que muchas veces es una tarea extremadamente dificil para el gran buscador.
El search intent posiblemente sea uno de los aspectos más complejos dentro del algoritmo de Google y para funcionar requiere la interpretación de datos a gran escala. ¡Quedate con nosotros hasta el final para enterarte de todo!
¿A qué llamamos intención de búsqueda?
Al momento de buscar en Google, podés tener diferentes objetivos. Puede que busques artículos para comprar en alguna tienda, que quieras saber si mañana va a llover o cuántos años tiene Godzilla (más de 250 al parecer).
No importa de qué se trate, cuando escribís palabras en el buscador, tenés una necesidad que debe ser resuelta con una intención de búsqueda clara. La cuestión es que esas intenciones pueden agruparse por categorías y sobre eso vamos a hablar en este artículo.
Lo fundamental para cualquier SEO es entender qué necesidad tiene el usuario cuando escribe determinadas keywords. Si lográs esto, le podés dar una respuesta precisa y así, con un poco de viento a favor, subir en el ranking de Google.
Pero esto es tan solo la punta del iceberg…
¿Por qué la intención de búsqueda es tan importante para el SEO?
La intención de búsqueda es importante porque, si la interpretás correctamente, podés crear contenido que responda a las inquietudes de los usuarios. Con la información adecuada, podés optimizar tus estrategias para darle a las personas exactamente lo que están buscando.
Veamos detalladamente cuáles son los beneficios que proporciona conocer el search intent:
🔸 Crear contenido relevante: la misión de Google es entregar contenido de calidad a sus usuarios o como me gusta decir a mi “satisfacer necesidades de los usuarios”. Para que puedas alinearte con esta premisa, es primordial entender qué quiere una persona cuando escribe en la barra de búsqueda. Si tu contenido responde a los criterios de búsqueda del usuario y a sus expectativas, mayores serán las posibilidades de que los motores de búsqueda te posicionen en los primeros puestos.
🔸 Mejorar la experiencia del usuario: si lo que ofrecés le resulta útil a las personas, es más probable que decidan hacer una conversión o volver en el futuro. Si querés que esto pase, enfocate en ofrecer respuestas claras y completas, textos bien estructurados y fáciles de leer.
🔸 Optimizar la segmentación de audiencia: te ayuda a identificar quienes están buscando la información que ofrecés, y adaptar tu estrategia de SEO para llegar a ellos de manera más efectiva.
🔸 Conocer al público para el cuál estás escribiendo es un deber del SEO. De esta forma, podés hablarle directamente a alguien que está interesado, lograr un vínculo y allanar el camino hacia la conversión.
🔸 Aumentar la tasa de clics (CTR): al optimizar tu contenido para responder a la intención de búsqueda adecuada, facilitás el trabajo de Google para que te posicione en las búsquedas acordes a tu contenido y, por ende, genera que tu CTR en las SERPs sea mayor (siempre y cuando tu title y description estén bien optimizados también).
🔸 Incrementar la conversión y el retorno de la inversión (ROI): ofrecer las respuestas correctas y brindar una experiencia de usuario positiva tenderá a impactar directamente en las conversiones y, consecuentemente, en el retorno de inversión. Con esto en mente, será prudente optimizar las páginas de destino y embudos de conversión para maximizar los resultados comerciales, mejor conocidos como “las ventas”.
Hasta acá todo muy lindo pero, ¿cuáles son esas intenciones de búsqueda de las que tanto hablamos?
¿Qué tipos de intención de búsqueda existen?
Existen varios tipos de intención de búsqueda pero para los fines prácticos de este artículo, y de tu vida como SEO, vamos a nuclear todo en tan solo tres: informacional, transaccional y navegacional. Veamos cada una en detalle.
Informacional
Como su nombre lo indica, acá el usuario tiene la intención de encontrar información o respuestas a sus preguntas, de forma genérica. La gama de posibilidades de búsqueda es tan amplia como la imaginación lo permita, pero te vamos a dar algunos ejemplos puntuales de intención de búsqueda informativa:
- “como hacerse el nudo de la corbata”
- “quien gana goku o superman”
- “pronóstico montevideo”
- “canciones de los 80”
- “ovnis abducción”
Transaccional
Es la necesidad del usuario de realizar una transacción, representada por la búsqueda de términos como: reservar, comprar, contratar, etc. Veamos ejemplos de intención de búsqueda transaccional:
- “alquiler de autos montevideo”
- “donde comprar las mejores camisas estilo disco”
- “servicio de reparación de lavarropas”
- “insumos pc cerca de mí”
- “locales de venta de motos”
En el primer ejemplo la intención transaccional se evidencia por la palabra “alquiler”. Claramente, el usuario desea alquilar un auto y está evaluando opciones para hacerlo. En el segundo caso, si bien el usuario está buscando información, la intención final es la de comprar, Google sabe que el usuario quiere ver modelos de camisas para comprar una que le guste.
Navegacional
La última search intent que definiremos en este artículo tiene que ver con una búsqueda de una marca. Aquí el usuario quiere buscar algo en un lugar en particular e incluye la marca dentro de las palabras que usa. Por ejemplo:
- “zapatillas nike”
- “mejores planes de movistar”
- “biblioteca de la universidad de zaragoza”
- “videos de el bananero”
- “servicio seo de dahseo”
Descifrar el search intent: ¿cómo lo hago?
Nuestro consejo es que, antes de comenzar a generar contenido en torno a una palabra clave, la busques en Google para entender qué tipo de resultados se encuentra el usuario cuando busca ese término.
Hacer esto te permitirá entender qué respuesta le tenés que dar y cómo hacerlo. Para esto último, debés ingresar en los primeros resultados que aparecen y ver qué información están ofreciendo.
Asimismo, cuando la palabra buscada presente varios resultados diferentes como puede ser “mercurio”, será importante entender con qué otras palabras está asociado el resultado que te interesaría posicionar. Retomando el ejemplo de “mercurio”, un usuario puede estar buscando el planeta, el elemento químico o el periódico.
Entonces… ¿puede haber intenciones de búsqueda híbridas?
La respuesta es sí. Es una realidad que cada persona es un mundo y más allá de la interpretación que Google pueda hacer de la búsqueda, es el usuario quien sabe mejor que nadie lo que busca.
En este sentido, ubicar la intención en una categoría en particular puede ser complejo. Lo importante en sí no es el nombre que le asignemos al search intent, sino la respuesta que el usuario quiera encontrar.
Como SEO, es nuestro deber entender qué quiere el usuario cuando ingresa una palabra clave y la mejor herramienta para ver esto es el mismo Google. Ahora veamos cómo trasladar toda esta información a una estrategia SEO.
¿Cómo incluir la intención de búsqueda en una estrategia SEO?
Para que no queden dudas, incluir la intención de búsqueda en una estrategia SEO es obligatorio para maximizar la relevancia y el valor de tu contenido. A continuación, te mostramos cómo hacerlo paso por paso:
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1. Investigación de palabras clave o keyword research
El primer paso es realizar una investigación exhaustiva para identificar las keywords relacionadas con tu industria, productos o servicios. Prestá atención a los términos y frases que reflejan las diferentes intenciones. Para esto vas a necesitar herramientas que te ayuden a obtener y analizar los resultados de búsqueda, y así, comprender qué tipo de contenido tenés que crear.
2. Optimización de contenido
Cuando identifiques las keywords más importantes, optimizá tu contenido en consecuencia, con el objetivo de responder a la intención de búsqueda del usuario. Ubicá los términos relevantes de manera natural en el título de la página, encabezados, contenido del blog o landing. También, proporcioná información útil y completa que responda a las necesidades que los usuarios tienen con respecto a dicha búsqueda.
3. Creación de contenido especializado
Considerá redactar contenido específico para cada tipo de intención de búsqueda. Por ejemplo, podés desarrollar artículos de blog, tutoriales o guías detalladas para las consultas informacionales y, para las consultas transaccionales, páginas de producto con descripciones claras.
Esta parte es clave. Recordá que para intenciones transaccionales se posicionan mejor las páginas con ese foco, mientras que para las informacionales, los artículos de blog, guías y videos se llevan toda la atención. Si tenés dudas sobre esto, hacé una búsqueda en Google de la palabra que quieras atacar y fijate qué tipo de resultados te ofrece. Te aseguro que con está práctica vas a tener todo mucho más claro.
4. Optimización del diseño y estructura de la página
Tanto a los usuarios como a Google les gustan los textos fáciles de leer. Por eso, es tu deber organizar el contenido de manera lógica y estructurada.
En este sentido, es preciso usar correctamente las etiquetas de encabezado (H1, H2, H3, etc.). Un diseño y estructura de página optimizados ayudan a los motores de búsqueda a comprender la relevancia y la intención del contenido. Pero también ayuda al usuario a entender qué le estás diciendo.
5. Enlazado interno y externo
El enlazado tanto interno cómo externo es un aspecto SEO clave que debés incluir en tu estrategia. Básicamente, sirve para que tanto Google como los usuarios puedan recorrer tu web o ampliar información si así lo desean.
Los enlaces internos pueden apuntar a otras páginas relevantes dentro de tu sitio web, mientras que los enlaces externos, a fuentes confiables para respaldar o enriquecer tu contenido.
Es importante que el texto ancla (conocido cómo anchor text) tenga palabras directamente relacionadas con el contenido linkeado y ofrezcan valor adicional al usuario.
6. Análisis y seguimiento
¿Cómo saber si la estrategia marcha bien? Simple, realizá un seguimiento y análisis constante de tus resultados y métricas de SEO. Aprovechá herramientas de análisis web para evaluar el rendimiento de tus páginas y comprobar si la interpretación de la intención de búsqueda ha sido correcta.
Acá es clave observar los patrones de búsqueda, las tasas de clics, el tiempo que el usuario pasa en el sitio y las conversiones que realizan. Esto te ayudará a entender cómo interactúan con tu contenido y te va a permitir hacer los ajustes necesarios para que tu estrategia alcance los objetivos que perseguís.
Final
Descifrar el search intent de una búsqueda suele ser una tarea qué requiere no solo mucho trabajo sino también experiencia. Por esto mismo, sabemos que todo esto puede resultar complejo si no estás familiarizado. Si ese es el caso, nosotros estamos para ayudarte y no dudes en contactarnos.
¡Muy bien! Hemos llegado al final del artículo. Esperamos que la información te haya sido útil y que puedas aplicarla en tu sitio web.
¡Gracias por leer, saludos!
